El 29 de noviembre se dio el último taller de Creatividad Emprendedora del 2021. Este taller se ha titulado “Impactando a las audiencias: el storytelling” y fue impartido por Javier Medina. Este taller se dividió en 4 puntos importantes.
Para comenzar, Javier Medina explicó que, básicamente, el storytelling, consiste en contar historias. Crear relatos y narraciones que sirvan para transmitir mensajes.
Primero se expuso el por qué nos gustan las historias. Recientemente, expuso, se ha descubierto que las historias forman parte de nuestro patrimonio genético. Y es que la humanidad se ha desarrollado gracias a la capacidad comunicativa y a los relatos. Y es que los relatos sirven para transmitir información.
El punto más importante de los relatos es, en general, el conflicto. El conflicto sirve para expresar una duda, pensar en una idea desestabilizadora, descubrir obstáculos a los que enfrentarse, implicarse en un enfrentamiento o partir de alguna situación de cambio. Son a raíz de estos conflictos sobre los que se desarrollan los relatos y que se pueden clasificar de distintas maneras según su trama. Durante este taller se vieron los siguientes tipos: “Vencer al dragón”, en el que el protagonista tiene que superar una gran adversidad; el “renacimiento” en el que el protagonista tiene que hundirse y volver a resurgir y crecimiento; el “viaje” en el que el personaje protagonista tiene que emprender un viaje -no necesariamente de forma literal- para conseguir alcanzar su meta; la “búsqueda” en el que tiene que encontrar algo o alguien que le ayude a su meta y, por último, “de la miseria a la riqueza”, el proceso en el que el protagonista va desarrollando su estatus hasta alcanzar el éxito.
Aparte de ello, se vieron las cinco características de una buena historia. La primera de ellas es la simplicidad: las buenas historias transmiten un único mensaje que no se diluye. Una idea potente. Otra característica es la sorpresa. Ningún público desea ver una historia que ya conozca y no le sorprenda. La concreción debe conseguir llegar a la emoción del público. Para alcanzar esta característica es importante plantearse algunas cuestiones como, por ejemplo, por qué dicho objetivo es importante para la audiencia, cómo le impacta directamente, por qué debería prestar atención al relato, cuál es el valor que le aportará y qué preguntas se hará. Otra característica importante es que el relato debe contar con verosimilitud. Si la historia no tiene coherencia ni cohesión, no conseguirá atraer la atención del público y, por último, la emoción: la mayor fuerza de las historias es su capacidad para desencadenar y transmitir emociones entre su público.
Además, es importante desarrollar la estructura del relato. Todas las historias están escritas de la misma manera: tres actos (principio, nudo y desenlace) y siete etapas. Según Pixar, las siete etapas de un buen relato cuentan con una exposición de la situación y hechos, con un desencadenante que hace ascender el conflicto hasta llegar a la crisis, por la que se llega al clímax hasta que al final se resuelve la situación.
Todas estas características fueron ilustradas con numerosos ejemplos audiovisuales sacados de spots publicitarios, películas, series, etc.
Esta actividad ha sido parcialmente subvencionada por el Instituto de Fomento de la Región de Murcia a través del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER), dentro del Convenio de Colaboración INFO-UPCT para la ejecución del Programa de Actividades de Emprendimiento en la Universidad de Politécnica de Cartagena, a través de la Cátedra Santander Emprendimiento y la Oficina de Emprendedores y Empresas de Base Tecnológica.